COMO ES ADENTRO ES AFUERA
Quien insulta, se insulta.
Quien desprecia, se desprecia.
Quien odia, se odia.
Quien maldice, se maldice.
Quien critica, se critica.
Quien miente, se miente.
Quien caya, se oculta.
Quien acusa, se acusa.
Quien maltrata, se maltrata.
Pues todo aquello que de nosotros sale a nosotros regresa, a nosotros pertenece y a nosotros afecta.
Todo lo que haces, piensas o dices del resto del mundo, te define en este momento y vuelve a ti convirtiéndose en un círculo, en una rueda que no es fácil de romper, así como en un gran engaño, debido al hecho de creer que toda esa visión pertenece sólo al exterior.
Si lo que de ti sale es engaño, espera sólo ser engañado (a); si lo que de ti nace es simpatía, disponte a recibir simpatía y, si lo que de ti surge es incomprensión hacia los demás, prepárate para no ser comprendido (a).
Porque lo que ves afuera, a tu alrededor, es justo lo que llevas dentro. Todo aquello externo a lo que tu mente presta atención, que enjuicias o valoras, es exactamente lo que existe en tu interior. Y cuanto más duele ver un defecto o un comportamiento en los demás, más profunda es la herida, porque reconoces la tuya propia.
Si quieres conocerte, pon atención a tu entorno, a todo lo que tu mente observa cada día a tu alrededor y estarás frente a un retrato de ti mismo(a), frente a un dibujo exacto de tu interior. Porque lo que es afuera, también es dentro.
¿O no son quizás los consejos que das a los demás los que mejor nos sirven a nosotros mismos, cuando nos encontramos en una situación parecida? Porque lo que de ti surge está hecho justo para ti, ahora, en este preciso momento!!!
Anónimo
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tomarte un tiempo y dejar tu comentario